1 Timoteo 3:15: 15 Y si no fuere tan presto, para que sepas cómo te conviene conversar en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y apoyo de la verdad. Hebreos 10:25: 25 No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos, y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.

Celo por la casa de Dios. Introducción: Nos acostumbramos… a vivir en nuestra casa y a no tener otra vista que no sea las ventanas que nos rodean. Nos acostumbramos a no abrir las cortinas. Y porque no abrimos completamente las cortinas nos acostumbramos a encender más temprano la luz. Celo por la casa de Dios Introducción: Nos acostumbramos a vivir en nuestra casa y a no tener otra vista que no sea las ventanas que nos rodean. Nos acostumbramos a no abrir las cortinas. Y porque no abrimos completamente las cortinas nos acostumbramos a encender más temprano la luz. Y a medida que nos… celo por la casa de dios Cuando Jesús anduvo en la tierra, testificó: “El celo por la casa de mi Padre me consume” (Ver Juan 2:16-17). Ahora, Su mensaje a los cristianos en Sardis, y a nosotros hoy, es este: “Disfrutaron de mi favor, con una buena reputación por doquier. Apr 08, 2014 · La Familia de Dios Ontario 3,175 views 41:17 Yiye Avila Predicaciones 2020 💞 ¡Cuidado, Estos Son Enemigos De La Oración! 🙏 Predicación Poderosa - Duration: 57:35. Y al estar acostumbrados nos olvidamos de las bendiciones de Dios. Juan 2:13-21 (Ver. 13-14) La bendición de la casa de Dios. ¿En que hemos convertido la casa de Dios? Damos gracias a Dios por el momento histórico que estamos viviendo, si usted tiene una Iglesia, usted esta gozando de una bendición que otros quizás no tienen.

El Celo por la Casa de Dios | Pastor de Jóvenes, José Luisa - Duration: 1:48. Iglesia Mover de las Aguas 37 views. New; 1:48. 12 Year Old Boy Humiliates Simon Cowell - Duration: 5:37.

Celo por la casa de Dios. Introducción: Nos acostumbramos a vivir en nuestra casa y a no tener otra vista que no sea las ventanas que nos rodean. Nos acostumbramos a no abrir las cortinas. Y porque no abrimos completamente las cortinas nos acostumbramos a encender más temprano la luz. Tal anhelo de una vida con Dios, en la casa de Dios, concluye lo que es quizás el salmo más conocido y amado: «Y en la casa del SEÑOR moraré por largos días» (23:6). A través de la obra expiatoria de Jesucristo y la unión con Él por el Espíritu Santo, los pecadores pueden llegar a ser hijos y familia de Dios. Sabemos que hay un celo que es divino, el que Dios expresa al decirnos que solamente a Él debemos adorar. Es un celo basado en amor, un celo que protege y cuida, originado por un sano sentido de pertenencia. Pero los celos no son ese tipo de celo, sino que surgen de la inseguridad y del temor egoísta. Por eso son tan dañinos.

1 Timoteo 3:15: 15 Y si no fuere tan presto, para que sepas cómo te conviene conversar en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y apoyo de la verdad. Hebreos 10:25: 25 No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos, y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.

Y al estar acostumbrados nos olvidamos de las bendiciones de Dios. Juan 2:13-21 (Ver. 13-14) La bendición de la casa de Dios. ¿En que hemos convertido la casa de Dios? Damos gracias a Dios por el momento histórico que estamos viviendo, si usted tiene una Iglesia, usted esta gozando de una bendición que otros quizás no tienen.